Periplo 2017, «VIAJAR POR AMOR AL ARTE»
[vc_row][vc_column][vc_empty_space height=»60px» image_repeat=»no-repeat»][vc_column_text]FESTIVAL PERIPLO 2017   VIAJAR POR AMOR AL ARTE   El viaje y el arte han estado a menudo íntimamente vinculados. Si –por ceñirnos al ámbito del Festival Periplo- nos centramos en la literatura, encontraremos de inmediato que esta ha encontrado en el viaje, desde tiempos remotos, una fuente de temáticas de primer […]

[vc_row][vc_column][vc_empty_space height=»60px» image_repeat=»no-repeat»][vc_column_text]FESTIVAL PERIPLO 2017

 

VIAJAR POR AMOR AL ARTE

 

El viaje y el arte han estado a menudo íntimamente vinculados. Si –por ceñirnos al ámbito del Festival Periplo- nos centramos en la literatura, encontraremos de inmediato que esta ha encontrado en el viaje, desde tiempos remotos, una fuente de temáticas de primer orden. Es clásico ya señalar a La odisea como el primer libro de viajes de la Historia de la Literatura. Mas este primer ejemplo no es sino la puerta de entrada a un torrente de hermosísimas páginas que nos abren al mundo y sus habitantes, que nos llevan a lugares remotos del planeta a los que, antaño, en los tiempos ajenos a las tecnologías actuales, era imposible tener acceso por cualquier otra vía.

Viajar por amor al arte literario y al descubrimiento del mundo y de las culturas de la Tierra ha sido pues una actividad tan antigua como prolija que ocupa un lugar prominente en el universo del conocimiento del mundo y a los tesoros que este contiene.

En esa dirección viajará nuestro Periplo de este año 2017, en su caudal central –como en cada edición, este se nutrirá de afluentes literarios y viajeros que lo enriquecerán y diversificarán-. En esa dirección, pero también en otra que está contenida en el lema que ilustra el programa de este año, Viajar por amor al arte. Como ocurre en otras facetas de la vida, muchos son los escritores que, para llevar adelante su actividad, deben enfrentarse a mil obstáculos, económicos, sociales, políticos, abandonar a menudo su país en contra de sus propios deseos, viajar pues a contra corriente para ejercer su derecho a la escritura, para satisfacer sus ansias literarias.

Serán por lo tanto unas aguas un tanto revueltas las que moverán los encuentros de este nuevo Periplo, lo que lejos de llevarnos al desencuentro nos permitirá arribar a un mismo puerto, el de la realidad del mundo de hoy, por caminos distintos pero que cumplen con un mismo cometido, el afán de acercarnos a lo que en este ocurre y un idéntico compromiso: el de hacer viajar a la literatura ahí donde sea necesario para un mejor acercamiento a los seres humanos y de las comunidades que conforman.[/vc_column_text][vc_empty_space height=»60px» image_repeat=»no-repeat»][/vc_column][/vc_row]